Oh, my god! Cuando vi la película Escuela del bien y del mal en Netflix supe de inmediato que tenía que leer el libro. Fue uno de los pocos filmes que vi dos veces debido a lo increíble que era su trama.

La historia de Sophie y Agatha engancha desde el principio mostrándonos a dos amigas que viven en un pequeño pueblo del que se sienten excluidas. Ambas son raptadas y llevadas a una tierra mágica donde un instituto, la Escuela del Bien y el Mal, les enseña a niños de diferentes tierras a convertirse en héroes o villanos.
La dulce y femenina Sophie, quien sueña con ser una princesa, es llevada a la escuela del Mal donde sufre de diferentes calvarios mientras intentan sacar su lado vil y cruel a la luz. Mientras, la desarreglada y antipática Agatha termina en la escuela del Bien donde sus profesores harán todo lo posible por convertirla en una delicada princesa. Agatha intentará por todos los medios que ella y su compañera vuelvan a su pequeño pueblo, aunque Sophie dará todo de sí para ingresar a la escuela del Bien y ser la princesa que siempre quiso ser. Amor, magia, acción, misterio, chistes y plot twist que te harán volar la cabeza se encuentran en esta maravillosa historia de Soman Chainani.
Como verán, la novela me ha encantado. Una historia que rompe con la estructura clásica de los cuentos infantiles haciendo que nos preguntemos qué es realmente el bien y el mal. Una obra que pone en primera plana la amistad y lo que uno es capaz de hacer por un amigo y por cumplir sus sueños.
Debo aclarar que me animé a comprar este libro en inglés. Al principio, al ver sus 488 páginas, pensé que nunca lo terminaría, ya que nunca había leído una novela tan larga en ese idioma. Sin embargo, la trama trepidante, el desarrollo de sus personajes, datos y hechos que no estaban en el film y su vocabulario sencillo, hicieron que me fuera posible leer esta historia y que, incluso, me la devorara.
El único detalle que no me gustó fue la relación un poco tóxica entre Agatha y Sophie, debido a que Agatha en varias ocasiones olvida que lo que más haría feliz a su compañera es ingresar a la escuela del Bien y encontrar el amor. En su lugar, hace todo lo posible por volver a su pueblo y retener a Sophie en una aldea que no la hace feliz. Agatha es presentada continuamente como el prototipo de buena amiga y alma gentil, pero esta actitud suya de querer a Sophie para sí y no tomar en cuenta sus sueños es lo que me hace pensar que su amistad es excesivamente dependiente hasta volverse algo tóxica. Espero que esta actitud suya vaya cambiando a lo largo del próximo libro.
Lo recomiendo para niños, adolescentes y adultos que sean fanáticos de la fantasía.
Una historia que por momentos se asemeja a Harry Potter, pero con su propia esencia. Le doy un 9 de 10.
Belén Cantorna
