Los Gestos Bárbaros es una obra escrita por Juan Ignacio Fernández, dirigida por Cristian Drut. Este drama, con pequeñas pinceladas de humor, deja entrever el amor y el horror de los vínculos familiares. Una madre que admite nunca haber querido serlo, hermanos que se envidian, una figura paterna ausente a raíz de un suicidio, dando pie a tratar las enfermedades mentales, quiénes las padecen y cómo afectan a su entorno.

La historia transcurre cuando Emilia (Valentina Bassi) regresa a casa de su madre (Silvina Sabater) luego de 15 años de ausencia, en el afán de reconstruir en su mente lo que olvidó tras un accidente. Lejos de una recibida calurosa y amable, se encuentra con un panorama familiar lleno de reproches, traumas, dolor y resentimiento de parte de sus hermanos y cuñada (Francisco Bertín, Ignacio Rodríguez de Anca y Laura Novoa). Los sentimientos reprimidos de esta familia dejan ver su origen en la muerte de su padre, disparador original para este quiebre familiar.
Cada personaje explora diferentes matices a lo largo de la obra, la madre egoísta que dice todo lo que piensa sin reparo de cómo afectará a sus hijos, una cuñada saturada de responsabilidades de su bebé recién nacido, el cuál por momentos se arrepiente de tener -desnaturalizando esa supuesta conexión innata entre madre e hijo-, el hijo mayor que carga con el peso de tener que ser el hijo perfecto obsesionado con su carrera política, y un hijo menor, -tan rebelde como frágil- que odia el capitalismo y sabotea la política. Y, por último, una hija ausente, atormentada y desorientada debido a su accidente.
La incomodidad y la tensión están presentes a lo largo de toda la obra, muy bien logrados a través de pausas, silencios y sonidos distorsionados. El movimiento de los personajes en escena, casi fantasmagóricos, también ayudan a esta sensación oscura y abstracta, al igual que la musicalización en manos de Daniel Melero.
La escenografía, si bien es muy minimalista, representa muy bien el estado de fragilidad de la mente de la protagonista. Tanto sillones como muebles rotos y desprolijos. Todos los personajes, en algún momento, interactúan con una taza de té vacía, elemento presente a lo largo de toda la obra, interpretado -quizás-, como lo que alguna vez los unió.
Los Gestos Bárbaros se presenta los jueves a las 20 hs en el Teatro El Picadero (Pasaje Santos Discépolo 1857, CABA). Las entradas se consiguen en el teatro y en PLATEANET.
Flavia Ferrari
