Una larga fila rodeaba el Movistar Arena de Buenos Aires, miles de espectadores estaban a la espera de la apertura de puertas a las 19 hs. Mientras llegaba la hora indicada, las calles de Villa Crespo estaban decoradas con remeras, buzos, lentejuelas y demás símbolos que fanáticos y vendedores exhibían. En tan solo unas pocas horas estarían presenciando un evento descomunal: la presentación de Tan Bionica en su maratón de regreso a los escenarios.
La banda argentina había anunciado una serie de presentaciones desde el año pasado después de encontrarse en una pausa indefinida. Este año sumó nuevas fechas y agosto fue el mes para cantar en la patria que vio nacer al grupo. Hoy martes 20, es el último día de presentación en Capital Federal, antes de continuar con la larga ruta en Latinoamérica y Europa.

Sobre el concierto
De parte de Claqueteados asistimos con una cobertura completa el 17 de agosto y la experiencia fue increíble. Nuestra mejor galería de fotos la podréis encontrar haciendo click aquí. Al abrir las puertas, la zona de campo estaba llena y las silleterías de platea también. Se percibía mucha emoción en personas de todas las edades, risas, nervios, expectativas. A las 21 hs las luces del recinto cambiaron y un azul profundo se reflejó. Los aplausos no se hicieron esperar y la antesala sonora fue Seven Nation Army de The White Stripes, el detonante perfecto para poner fin a la espera: era el inicio del concierto.
La proyección de una pantalla con las palabras La última noche mágica antecedía una secuencia de fotos de cada uno de los integrantes, Santiago Moreno Charpentier (Chano), Sebastián Jorge Seoane (Seby), Gonzalo Moreno Charpentier (Bambi) y Diego Lichtenstein (Diega): Tan Bionica estaba más presente que nunca.
El espectáculo de la banda mezcló luces y sonidos todo el tiempo, las letras de las canciones inspiraban al baile, a la escucha y al pogo. El inicio de todo el evento musical fue la instrumental para esta gira llamada La última noche mágica y luego le siguió El huracán. Los saltos no se hicieron esperar y, en campo, la gente se acercaba cada vez más al proscenio: nadie quería perderse la oportunidad de sentir, en todo sentido, cada sonido.
A la lista se le sumó otras canciones como Vámonos, Arruinarse, Música o Loca. Esta última fue cantada con mucha más emoción y era inevitable no sentir el impacto que tenía en el público, los coros y las voces llegaban de extremo a extremo en el Movistar Arena. La otra manera, Tus horas mágicas y Un poco perdido fueron parte de una serie de sube y baja emocional que cada espectador percibía en los sonidos y las luces que le acompañaban. Fue entonces cuando en medio de cada canción y al vaivén de la batería, se hizo un gran círculo en el medio: se venía el pogo. Jóvenes y adultos dejaron un espacio vacío en la zona de campo para luego saltar con todas sus fuerzas y vivir las letras de manera más física.
Después vinieron otros éxitos como Lunita de Tucumán, El Duelo, Ella. Todas las personas estaban absortas y, en medio de canción y canción, esperaban sorpresas. Cabe destacar la astucia y las mezclas sonoras que propuso la banda, casi diez minutos de una mezcla que seguía con Vidas perfectas y el set DJ montado a cargo de Diega. El show fue acompañado por luces e imágenes que daban un ambiente cool entre el romanticismo y el movimiento corporal: Tan Biónica fue más allá de solo sus letras.
En una parte del concierto, Chano junto con la banda siguieron con Pastillitas del olvido, Claramente y Beautiful, y, al finalizar esta tanda de canciones, invitó a Rodrigo Martín de Juana la Loca para cantar Angelical. Esto, en medio de agradecimientos hacia Martín y a la banda que le inspiró en sus años de juventud para hacer de la música su estilo de vida.
De un momento a otro, las luces del escenario bajaron y solo se escuchaba un solo de guitarra. Fue entonces cuando en el otro extremo del recinto y más cerca de las gradas del fondo, apareció Chano, entonces, el público tuvo que voltearse para contemplar en un modo más íntimo una secuencia de canciones acústicas como La ensalada, Yo te espero y Poema de los cielos. El agradecimiento y manejo del escenario de la banda fue hermoso, se sentía su entrega y respeto para la fanaticada.
Tras cantar otros temas hits como Ciudad Mágica, Mis noches de enero o Obsesionario en La Mayor, llegó finalmente La Melodía de Dios, que fue la canción de cierre, entre cantos y a capela, Chano nos regaló un final inesperado y emotivo. Sus últimas palabras fueron de agradecimiento por todo el apoyo y la acogida. Una ola de aplausos no se dejó esperar y entre coreos y festejos, la fanaticada disfrutó de un show espectacular lleno de luces y esperanza.
Hoy martes 20 de agosto, Tan Bionica se presentará una vez más en el Movistar Arena. Un evento que cierra por este mes las presentaciones en Capital Federal para continuar con la gira.
Redactora: M. Andrea Soto
Fotografía: Aixa Martínez
